En las pollerías se manipulan productos cárnicos susceptibles de ser contaminados con mucha facilidad. En estos comercios minoristas los trabajadores juegan un papel fundamental en la manipulación de la carne fresca refrigerada. Así el profesional responsable tiene como único objetivo ofertar productos de calidad y seguros desde un punto de vista sanitario. Por otro lado los consumidores cada día somos más selectivos y buscamos productos de calidad y seguros.
La manera de garantizar la seguridad alimentaria de estos productos es mediante la implantación de un sistema de trabajo basado en el Análisis de Peligros y los Puntos Críticos de Control APPCC. Para que este sistema sea efectivo todo el personal debe estar comprometido y formado sobre cuáles son las prácticas correctas de higiene necesarias para evitar contaminar los productos comercializados.
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